Esta es la primera de la serie de entradas "sus propuestas .vs. nuestras propuestas"
Nos oponemos e inadmitimos la propuesta del PSOE sobre la Iniciativa Legislativa Popular (I.L.P.), ya que los términos que constan en su programa electoral desvirtúan aún más si cabe la misma y la reducen definitivamente a su papel de simple convidada de piedra. Asistimos a un nuevo intento de deslegitimar y desnaturalizar la participación legislativa popular, volviendo a no reconocer la capacidad legislativa que corresponde al pueblo como titular de la soberanía nacional
No se puede hablar de facilitar ni mejorar una iniciativa popular que no pretenda en primer lugar ampliar sus tremendos límites en materias y contenidos, por lo que dentro de su ámbito de aplicación, la mejora y facilitación propuesta es insignificante e inexistente, según está establecido en el actual orden constitucional que la restringe máximamente. Con esta propuesta se ratifica y defiende dicha limitación, intentando mostrarla como una ampliación de la participación ciudadana que es absolutamente falsa.
Lo que se pretende con esta propuesta política partidista es volver a embaucar y retirar a la ciudadanía de la elaboración normativa para que pueda seguir siendo monopolizada por los partidos políticos con representación parlamentaria. Con esta propuesta se desnaturaliza aún más la I.L.P. al mezclar el poder legislativo que corresponde al parlamento con el poder legislativo que corresponde al pueblo. Porque de esta forma que se propone se limita la defensa en el Parlamento de esa I.L.P. a un “diputado número 351”, pasando a formar parte del parlamento, siendo un integrante del mismo, y potenciando que la I.L.P. esté dentro de dicho sistema. Esto hace que la I.L.P. no sea, como debe ser, una alternativa independiente de propuestas legales, que surja autónomamente del Parlamento, para que luego éste las debata, elabore y apruebe, sino que se transforma en un diputado más, cuya participación se limita a intervenir “con voz pero sin voto” con lo que dicha propuesta es más de lo mismo, un paso más en la realidad democrática existente donde el pueblo sólo puede asumir o protestar, pero nunca decidir sobre sus normas.
Tras esta valoración sobre el programa del PSOE, y examinando las propuestas que se reseñan en el programa del PP, sobre éste nos sorprende que el termino “iniciativa” solo aparece como “reconocer el derecho a la oposición a promover iniciativas”. Es decir, la única finalidad de la agrupación política es considerar la utilización de dicho recurso en exclusividad por los partidos políticos con representación parlamentaria, ignorando más si cabe la iniciativa legislativa popular y el derecho al pueblo, a quien dicen representar, a decidir.
El grupo de trabajo de Política a corto plazo de Sol propone:
- Una I.L.P. ampliada en sus materias y contenidos, con la eliminación de las limitaciones existentes de la actual constitución.
- La creación de mecanismos para la deliberación y debate de la ciudadanía en la elaboración y propuesta de dicha I.L.P.
- La creación de mecanismos jurídicos y procesales para la defensa de la misma en caso de rechazo por el parlamento, más amplio que los existentes.
- Más mecanismos de participación y deliberación de la comisión promotora de la I.L.P. con los grupos parlamentarios para la creación del texto legal definitivo.
- La remisión de la I.L.P. para que, por referéndum vinculante, sea aprobada o rechazada por el pueblo como forma de aprobación diferente a las leyes que el parlamento aprueba (sin ningún tipo de consulta popular).
Que no, que no, que no nos representan, que no…
Más información: Contracampaña: Por el estado de participación permanente
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