Mensaje para 2011 de Política Corto Plazo

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En las celebraciones de estas fechas festivas y de fin del año que se nos imponen, en las que los chorizos que nos desgobiernan acostumban a felicitarnos por haber sido dóciles y serviles y nos invitan a seguir siéndolo, queremos aprovechar desde Política a Corto Plazo para felicitamos, a nosotras mismas, la gente, por no haber sido unos borreguitos tan buenos y habernos rebelado, aunque haya sido sólo un poco, frente a sus innumerables agresiones, imposiciones, recortes… Porque, a pesar que lo mucho que queda por hacer nos impide parar ni a tomar aliento, tampoco está de más felicitamos por haber tenido el valor de plantar cara este año que se acaba, en la medida de lo posible, al injusto sistema que nos desgobierna. Nos llamamos a seguir con lo nuestro, a continuar avanzando en la movilización permanente, que ya no se detendrá jamás, ante nada y ante nadie, pues el mundo no es el mismo desde el 15 de mayo de 2011.

(1) ¡Buenas noches! Queremos que nuestras primeras palabras sean para todas aquellas personas que esta noche dormirán en la calle, olvidadas por la competitividad del sistema; para quienes ven desaparecer el llamado estado del bienestar antes de llegar a conocerlo, para quienes trabajan pero ya no llegan a fin de mes, las personas que ya no tienen trabajo, las desahuciadas, las sobreexplotadas, las mal pagadas, en definitiva, a quienes están ahogándose por la crueldad sin límites del sistema económico capitalista mundial, que en este año ha alcanzado su clímax, les deseamos lo mejor para el Año Nuevo 2012: la desaparición del des-orden establecido.

(2) Llegamos al final de un año difícil y complejo, marcado por la declarada sumisión de los políticos, en España y en otros países, a la voluntad de sus verdaderos amos, los bancos y las corporaciones que conforman el poder económico. No podremos confíar por más tiempo en ellos. Los partidos políticos, que ya habían convertido la política en algo indigno, están usando el poder que han usurpado al pueblo para despojarle de todas sus defensas ante el capital, que destruye el bienestar que a tantas generaciones ha costado construír y aplasta a quienes sólo pueden llegar a soñar con él.

(3) Estas agresiones han encontrado en nosotrxs un freno, que,si bien puede que haya quienes lo consideren muy limitado, tiene el inmenso poder de mostrar que el sistema económico y político que nos gobierna es injusto; la fuerza de recordar que su continuidad depende de nosotrxs. Durante el año que dejamos atrás, hemos intentado y a veces conseguido paralizar numerosos desahucios en todo el país, hemos logrado liberar de las garrras de la especulación inmobiliaria espacios sin vida y los hemos abierto al disfrute del pueblo, ofreciendo en ellos alojamiento digno a los damnificados en lo posible, dándoles así una nueva oportunidad de rehacer sus vidas, una oportunidad que el sistema les niega.

(4) Hemos estado con los afectados por los recortes en la escuela pública, con quienes reclamaron con nosotrxs la aconfesionalidad del Estado, enfrentando cada agresión del sistema, cuando cambiaron la Constitución al dictado de los mercados financieros, cuando recortaron nuestros derechos electorales, hemos combatido la desinformación de los medios politizados y movilizado a medio mundo, hemos ocupado las plazas para revalorizar el consenso y reclamar un cambio radical hacia un nuevo modelo, hemos identificado los males de esta sociedad y hemos denunciado las carencias e irregularidades del sistema electoral, ofreciendo tantas alternativas que no caben en todas sus urnas juntas.

(5) Pero por encima de todo, hemos contagiado a la sociedad un nuevo espíritu de deliberación, de búsqueda de espacios en común y de verdadera superación del pasado trincherista y demagógico, hemos puesto la simiente en la sociedad de un cambio profundo en su actitud ante la política, ante la gestión de lo público y ante la misma manera de ver a sus vecinxs. Estamos creando redes de deliberación y autogestión, redes alternativas al poder vigente, que posibiliten nuevas formas de compartir lo público alejadas de la pésima gestión y el escaso nivel democrático que se nos impone. Es nuestro derecho y nuestro deber, como gente libre, no manipulada, no partidista, no apabullada ni dominada por temor alguno, participar en ellas aportando lo que podamos para conseguir entre todxs un mundo mejor.

(6) Ante todo esto, el sistema sólo ha sabido responder con más violencia. Nuestros derechos están siendo vulnerados en todos los frentes, la inmensa mayoría de lxs habitantes están ya sufriendo el saqueo de España como su propia pesadilla. Parados, desahuciados, ochocientoseuristas, numerorojistas, pobre-pensionistas, exmaestros, funcionarixs-recortadxs, medicxsexplotadxs… no debe importarnos el grado en el que se nos agrede pues todxs somos víctimas de la misma maldad, y, sin duda, pronto seremos más. Por eso no debemos ocuparnos sólo de paliar las consecuencias, sino atacar el problema de raíz. Somos el pueblo, titular de la soberanía nacional, de nuestra voluntad depende que la democracia sea efectivamente el gobierno del pueblo en beneficio de todxs y no el gobierno de una élite en beneficio de los mercados.

(7) En este país hemos sufrido el estallido de la burbuja inmobiliaria como en ningún otro; la raíz de nuestra crisis económica, con el enriquecimiento desmedido de unos pocos con un bien que debiera estar protegido, como es la vivienda, objeto sin embargo de un modelo económico basado en la depredación, la especulación y la corrupción asociada al urbanismo salvaje. Hemos sido objeto de la estafa y crisis de la banca, del recorte en inversión y deuda pública, del déficit en servicios básicos, del expolio medioambiental y cultural, de la práctica negación de lo común y de la corrupción política generalizada, sin olvidar el saqueo de lo público, que alcanza las más altas insituciones del Estado, incluyendo la Casa Real.

(8) Lejos de usar su poder para evitar el pillaje, los políticos que sufrimos han aprovecahdo para llenar sus bolsillos, especulando con suelo público e inflando su valor, siendo por ello los principales culpables de la situación insostenible del mercado inmobiliario, o despilfarrando los fondos públicos en inútiles proyectos faraónicos en los que repartirse comisiones millonarias. Pero ahora, cuando la recesión ya es un hecho y nos despertamos arruinados, nos culpan a nosotrxs, por haber querido vivir “por encima de nuestras posibilidades”, por trabajar poco, por cobrar mucho… Y hacen repercutir en nuestras ya maltrechas economías la totalidad de los ajustes, unos ajustes que no serán jamás suficientes, pues el capital es insaciable.

(9) Hemos sido llamados a acatar un Gobierno en mayoría absoluta al que apenas ha votado el 22% de los españoles, poco más del 30% de los que podían hacerlo y menos del 45% del voto válido. Un Gobierno que gracias a este injusto sistema electoral tendrá vía libre para ejecutar los recortes e imposiciones que le dicten los bancos y corporaciones, sin posibilidad legal alguna de detenerle, sin defensa alguna al no disponer de libertades políticas de participación democrática. En este año que nos viene las subidas de servicios básicos se prevé puedan llegar hasta el 25%, para una población en situación de congelación salarial o reducción o pérdida del empleo, mientras que los beneficios empresariales seguirán aumentando.

(10) Estamos asistiendo con perplejidad al desmoronamiento de la Europa del capital, una Europa que lejos de cohesionarse socialmente ha mantenido con pinzas una unión meramente económica, que certificó la imposición de la llamada “Consitución Europea”. Parecía ir bien cuando iba bien, pero ha bastado el primer golpe de mercado para que cunda la insolidaridad, el pánico, la desunión, el sálvese quien pueda. Los países “ricos” han dado la espalda a los “pobres”, cuando no les han empujado aún más al abismo acusándoles de improductivos, manirrotos… los intereses del capital han prevalecido, y es sólo cuestión de tiempo que el “sueño de una Europa unida” se desvanezca completamente, cuando no se transforme, si no se afrontan de una vez los problemas con el espíritu transnacional necesario, en una pesadilla para sus moradores.

(11) Pero no podía ser de otra forma, no podían marchar bien España ni Europa por sí solas siendo sólo una parte de un mundo absolutamente dominado por los imperios de las multinacionales, empeñado en una globalización equivocada, criminal, que marcha a pasos de gigante hacia la autodestrucción. La población mundial ha asistido impotente al visto bueno a la continuidad del saqueo suicida de los recursos en Durban, al sometimiento de los países a las agencias del crimen, la industria militar, la farmacéutica, al triunfo inapelable del complejo industrial militar. Ningún indicador del poder nos ofrece la más mínima esperanza en este mundo, nos encontramos en soledad macabra ante el cambio. Las personas, sin duda, somos sólo mercancía, moneda de cambio, en sus manos.

(y 12) No podemos continuar más tiempo sufriendo este sinsentido, este desorden premeditado. No podríamos aunque quisiésemos, ¿cuánto duraremos, hasta dónde más puede recortarse el bienestar, en qué grado se convierte en profundo malestar e indignación? Muchas ya hemos llegado, ¿esperará el resto a que le toque también? Porque es seguro que les tocará. Es necesario movilizarse, llamamos al pueblo a la desobediencia, reclamando la apertura de un proceso constituyente, donde las asambleas, los barrios, la gente, participen como actor político con poder decisorio. Un proceso que deberá cambiar drásticamente el orden establecido, primando la participación, regenerando la democracia y el sistema financiero, y reclamando el poder constituyente, para que el pueblo pueda en adelante decidir democráticamente en cada momento la forma de Gobierno más acorde con la evolución y el progreso de su cultura participativa.

Política a Corto Plazo – 15M – Sol