Comunicado del Grupo de Trabajo de Educación 15M en apoyo a la semana de lucha, convocada por las familias y estudiantes, en la enseñanza pública madrileña.

Durante estos meses hemos asistido casi impasibles, a unos de los mayores recortes en derechos y libertades sociales, sólo comparables a los que pudieron darse durante la dictadura. Se han impuesto a golpe de decreto, políticas abusivas tales como la reforma laboral, la subida del IVA, el repago sanitario, la no asistencia a inmigrantes y la no renovación de las tarjetas sanitarias; las cesiones de suelo público, la intención de privatizar y/o externalizar servicios como Renfe, el Canal, comedores, limpieza…. Los recortes de personal en centros hospitalarios, el cierre de urgencias y centros de salud. Los rescates bancarios multimillonarios, las ventajas fiscales a los defraudadores, la facilitación de los desahucios, el incremento de las políticas represivas (que van desde, por ejemplo, la propuesta de la reforma del código penal para hacer imputables con penas de cárcel, las manifestaciones pacíficas o las convocatorias por internet hasta una propuesta de reforma de la ley del aborto).

En este amplísimo abanico de medidas impuestas por este gobierno (iniciadas algunas por el anterior) y que en apariencia buscan una salida de la crisis a costa de contentar a los mercados desangrando a los que menos tienen, nos encontramos que todas estas medidas, usan la crisis como excusa, y, en realidad, esconden un propósito más temible que es el desmantelamiento de todo lo “público” y el recorte de derechos y libertades.

Y es dentro de todo esto, donde los ataques a la educación pública cobran una especial relevancia, son una de las claves fundamentales. Todos entendemos que la educación es uno de los pilares básicos de la sociedad, el dar la opción de una formación libre, gratuita, laica y para todos y todas es un derecho humano y universal, recogido en la Carta de Derechos Humanos, La Carta de Derechos del Niño e incluso la misma Constitución, entre otras. ¿Qué interés podría tener entonces un gobierno para cercenar el acceso a la mayoría de la población a ese derecho básico? La respuesta es sencilla, se trata básicamente de volver a un tiempo en el que la educación no era un derecho sino un privilegio que sólo estaba al alcance de aquellos que podían pagarla.

Y es que este curso, a la vuelta del verano, los profesores/as, padres y madres y alumnado nos encontramos ante un panorama desolador; además de las cesiones de suelo público para colegios privados, las subvenciones para que las familias lleven a sus hijxs a centros concertados, la injerencia cada vez mayor de empresas privadas en los colegios, institutos y universidades (a través de programas como Empieza por educar, plan Proa, o Becas salario…) y que son ya prácticas habituales en la Comunidad de Madrid, este año, tenemos que unir la subida del IVA en el material escolar además de la retirada o restricción de becas de libros y de comedor; una subida espectacular en tasas de matriculación de FP y Universidades (además de una reducción de las titulaciones al no ser consideradas muchas de ellas rentables o útiles); 2500 profesores interinos menos, un aumento de los ratios en las aulas junto con una reducción obligatoria de al menos un profesor en todas las plantillas de los centros; eliminación en la práctica totalidad de los centros de la figura del maestro de Educación Compensatoria y Aulas de Enlace; reducción de los recursos para atender a alumnos con necesidades educativas especiales (PT; AL; y Servicios de Orientación en los centros); instrucciones específicas para que no se cubran las bajas de menos de 15 días de un profesor/a …y un laaargo etc…

Compañerxs… está claro, … hemos aprendido y enseñado por encima de nuestras posibilidades.

Desde el Grupo de Trabajo de Educación 15M de Sol pensamos que NO.

Es por ello que manifestamos nuestro apoyo a la Semana de Lucha del Sindicato de Estudiantes y a la Huelga de padres/madres convocada por CEAPA para el 18 de octubre, como un modo de mostrar nuestra condena a todos estas políticas injustas y represoras, a estos recortes que atentan contra los derechos fundamentales.

Secundamos cualquier tipo de acción que se plantee desde los centros educativos como forma de lucha contra estas medidas.

Desde aquí, convocamos y animamos a padres y madres, profesores/as, alumn@s y a toda la sociedad a presentar batalla desde los centros educativos y universidades en forma de acciones como asambleas informativas (de profesorado a padres/madres y entre padres/madres); reflejar nuestro descontento en forma de paros programados durante la jornada laboral, movilizaciones, visibilización en los centros del apoyo a la lucha en favor por de la enseñanza pública (el color verde es nuestra enseña); cartas a las familias donde se informe de las repercusiones de los recortes; boicots a la administración, no participación en proyectos propuestos desde la comunidad y ayuntamientos, boicots a las editoriales, huelgas de consumo, aulas en la calle… y todas aquellas que se nos ocurran como forma de desobediencia y rebeldía ante una situación injusta y tirana y que se ensaña nuevamente con los que menos recursos tienen.

Asimismo manifestamos nuestro apoyo a las campañas de insumisión promovidas desde colectivos como el sanitario y todas aquellas que abogan por una defensa de” lo público”.

La enseñanza no es un negocio y los alumn@s, familias y profesorado no somos mercancía.